BENASQUE EN FIN DE AÑO

    Como se nos hace raro pasar una Nochevieja sin nieve, nos acercamos a Benasque. El día 30, después de escalar en Alquézar nos fuimos a los Llanos del Hospital. Dormimos en el aparcamiento que hay antes de la barrera, y a la mañana siguiente nos preparamos para darnos un paseo con las tablas de travesía.

    Subimos por la pista de esquí de fondo hasta la Besurta, y desde allí pensábamos subir hasta la Renclusa, continuar hacia el glaciar de las Maladetas y bajar luego por los tubos del Paderna. El caso es que a la sombra hacía un frío considerable, y la nieve estaba durísima, así que a medio camino de la Renclusa cambiamos de planes, y nos fuimos hacia Aigüalluts.

     Ni qué decir tiene que acertamos de pleno. Un solecito...Desde donde está Miguel se ve el glaciar del Aneto. Una de las veces que hemos subido al Aneto lo hemos hecho por aquí, pero esa es otra historia...

En fin, a alguien se le ocurre una forma mejor de pasar el día de Fin de Año? La vueltecita nos duró hasta las cuatro de la tarde. Luego tocó paseíto por Benasque, y nos subimos a cenar y a dormir al aparcamiento de la estación de esquí de Cerler.

Miguel preparando los clásicos volovanes de nuestro menú de Nochevieja.

Un brindis por todos y a cenar!! Para cuando dieron las uvas ya no nos quedaba cava para brindar!!!

Y el día de Año Nuevo sacamos el forfait y aprovechamos las pistas medio vacías. Mucho sol, poca gente, buena nieve...qué más se puede pedir!!! La verdad es que fuera de pista no había casi nieve, pero las pistas las tienen muy bien cuidadas.

Bueno, no se nos dió mal, teniendo en cuenta que sólo practicamos una vez al año, je, je, je...