AIGUILLE NOIR DE PEUTEREY 3773m. Cresta Sur

No sé cuántas veces hemos visto su perfil y hemos soñado con escalarla. Al principio porque nos venía grande, más tarde porque no encontrábamos buen tiempo, el caso es que se ha hecho de rogar, pero este verano sí, ya es nuestra...
El Sábado 17 de Julio nos fuimos a Courmayeur, a Vel Veny. Preparamos nuestras mochilas, y después de comer nos subimos al Refugio de la Noir, o Refugio Borelli.
Se tardan unas 2 horas, y la subida es bastante entretenida, pues hay una ferrata muy aérea en algunos tramos. 
El Refugio Borelli es pequeño, pero en verano suele estar guardado. Conviene preguntar antes de subir, pues te puedes ahorrar algo de peso en la mochila. Nos dieron de cenar y desayunar por 45 euros a los dos, lo cual nos pareció un lujo, teniendo en cuenta dónde está y la dificultad para subir allí cosas. Normalmente el precio es el doble.

A la mañana siguiente salimos del refugio sobre las 7.00, y a las 8.00 ya estábamos a pie de vía. Más tarde nos dimos cuenta de que teníamos que haber madrugado más, pues la idea era hacer cumbre ese día y  vivaquear en la bajada, pero no fué posible, y nos costó dos vivacs...

Fuimos muy lentos, por no escalar más tramos en ensamble, y además nos despistamos con la reseña. Subimos casi hasta la punta de la "Bífida", cuando sólo hay que bordearla, y más tarde hubo un momento en que pensábamos que estábamos en un lugar donde no estábamos. En fin, alpinistas de pacotilla...
El caso es que a las 7.30 de la tarde, ya cansados de navegar, encontramos un vivac justo antes de la Punta Brendel, y allí nos quedamos (3250m).
A la mañana siguiente empezamos a escalar a las 7.30, e hicimos cumbre a las 5.30 de la tarde. Lo ideal es dormir en unos vivacs muy buenos que hay justo antes de la Punta Ottoz, con nevero para fundir nieve. Debajo de la cumbre hay otro vivac, pero es muy pequeño.
Después de hacernos unas fotos con la virgen que hay en la cima de la Aiguille Noir, comenzamos a bajar.

A las 7.30 de la tarde llegamos a un vivac muy bueno que hay bajo una piedra, con nevero incluido, y allí nos quedamos (3500m). Si no te conoces la bajada es mejor hacerla con tiempo por delante.

A la mañana siguiente empezamos a bajar a las 7.30. Nos llevó 7 horas llegar al nevero a pie de pared!!! La bajada nos pareció terrible. Una sucesión de destrepes "pa matarte", arista, rápeles...menos mal que han puesto mojones para orientarte de hacia dónde debes ir, pero aún así, mucho cuidado!! De hecho, hoy por hoy, sabiendo cómo es el descenso, hubiera sido mejor continuar desde la Aiguille Noir y hacer la integral, sólo que eso quizás nos hubiera llevado 5 días, je, je...
Más tarde, ya en casa, nos enteramos de que el día 21 de Agosto se mató en este descenso la escaladora belga Chloé Graftiaux, campeona de bloque del mundo de este año.

En cuanto al material, llevábamos los sacos ligeros de plumas, las esterillas ligeras, un hornillo, dos bombonas pequeñas, comida para dos días, tres litros de agua y uno de aquarius. Una cuerda de 60m, un juego de fisureros, el alien amarillo, el camalot rojo, el morado y el amarillo, y cintas largas. Hay muchos bloques de roca para montar reunión. No llevábamos crampones ni piolet, aunque hay que tener en cuenta que el nevero está un poco helado a primera hora de la mañana. Es muy útil llevar una reseña descrita, como la de la guía Vallot.

La ferrata que sube al refugio va al lado izquierdo de la cascada, y en la parte superior el camino cruza hacia la derecha, hasta el refugio. A fondo se ve recortada sobre el cielo la cresta sur a la Noir.

Subiendo por la ferrata la mochilita tira un poco "pa trás".

Buscando por dónde cruzar para dirigirnos al refugio.

Con las últimas luces no dejamos de contemplar nuestro objetivo. Parece tan evidente desde aquí abajo...

Miguel a la puerta del refugio la mañana que salimos.

No nos hicieron falta los crampones. Había poca nieve, aunque algo dura a primera hora de la mañana.

Algunos habían madrugado más que nosotros y nos dejaron sus huellas en la nieve. La entrada es evidente, y apenas había rimaya.

Primeros metros de escalada. La roca parece buena y las sensaciones son muy agradables. El sol nos lleva dando desde las seis y media de la mañana.

Las placas que hay bajo la Punta Gamba. Hay que ir subiendo hacia la derecha, buscando la canal que separa la Punta Gamba de la Bífida.

Detrás nuestro la Aiguille Croux.

Cruzando la canal.

Pasada la Punta Gamba, y camino de la Punta Bífida, que se ve arriba a la izquierda.

Hay que ir a parar a la brecha que hay justo después de la Punta Bífida.

Subiendo hacia la Punta Wenzelbach. 

Vista del Mont Blanc desde la cresta.

Después de hacer cumbre en la Punta Welzenbach hay que hacer un rápel que te deja en unos vivacs que nos parecieron ideales para pasar la noche. Allí nos quedamos...

A la mañana siguiente, un desayuno frugal, sin más remedio...y a la tarea!!

Comenzamos la ascensión hacia la Punta Brendel.

La sección de V para llegar a la Brendel.

Pasada la Punta Ottoz, hacia la Punta Bich. Desde la cumbre de la Bich se rapela hasta una canal, se bajan unos metros andando, y atravesando hacia la izquierda en el sentido de la bajada, se comienza a crestear hacia la Aiguille Noir. Con mucho cuidado, porque la roca está muy suelta y suele hacerse en ensamble.

En la cima de la Aiguille Noir.

Desde la cima se comienza a descender por la ruta normal. Nos quedamos en el primer vivac que encontramos. Una cena frugal también, pues no teníamos prevista una segunda noche.

Eso sí...qué vistas más bonitas tuvimos desde nuestro segundo vivac...

Al día siguiente, con las primeras luces y sin nada en la barriga más que un poco de agua caliente, nos enfrentamos con la terrible bajada.

Conviene llevar una reseña de la bajada más completa casi que la de la subida.

Creo que no he pasado más miedo en mi vida...

Cuando pisé suelo firme se me saltaban las lágrimas...

Los croquis lo sacamos de Le Guide di Alp, y la reseña escrita (muy conveniente llevarla), de la Guía Vallot.