GUADARRAMA REVIVAL

Las nevadas de la semana pasada habían dejado la sierra en muy buenas condiciones, pero la que cayó el miércoles nos ha hecho recordar travesías que hacía años que no gozábamos por estos lares.

El viernes por la noche nos subimos a dormir al Puerto de Navacerrada, para ahorrarnos el madrugón y atasco mañanero. Mientras desayunábamos, la gente se peleaba por aparcar. Cuando ya habían dejado el aparcamiento tranquilo, salimos nosotros...

Comenzamos desde el aparcamiento pequeño de Navacerrada. El bosque estaba impresionante.

La gente, como loca, hacía ya un rato que andaba metida en faena.

Nosotros pian pianito, camino de Bola.

Peñalara también se veía espectacular.

Desde Bola, veíamos Valdemartín y Cabezas, como hacía tiempo que no lo veíamos...

Bajamos hasta el río por una nieve disfrutona y fácil de dominar. El río era un hervidero de gente. Gente bajando, gente subiendo, gente de cháchara, gente comiendo...

Desde el río subimos a Valdemartín. En las cumbres un poquito de frío. Y nos tiramos hacia el Ventisquero de la Condesa. Otra bajada que nos encontramos en muy buenas condiciones. Mucha nieve, sueltecita, cansapiernas...

Desde el Ventisquero una subida larga hacia Cabezas de Hierro.

Mientras llego yo, Miguel hace una foto a Bola desde Cabezas.

Y otra de la ladera sur de Cabezas, por donde bajaremos en breve...

Y por fin llego, y emprendemos el descenso hacia la Pedriza.

 

Cuando nos parece que ya hemos bajado bastante, hacemos un descanso un poco más largo para tomarnos la merienda...

Y otra vez para arriba. De nuevo a Cabezas. Desde allí bajamos en descenso mortal hasta el río, para hacer nuestra última subida a Bola.

Poca gente queda ya. Estarán todos viendo el partido...

Miguel fotografía Bola...

Y yo, detrás, le fotografío a él.

Pisamos Bola por segunda vez. Nos abrigamos, y para casita...

Pasamos un día fantástico. Unos 1.800 metros de desnivel y unos 17 kilómetros de recorrido. El track lo colgó Miguel en el Wikiloc. Aquí dejo el enlace: Vueltecita por Guadarrama

El dolor de piernecitas era descomunal, así que tuvimos que tomar una buena cena reconstituyente para afrontar el domingo con ganas. Por un momento habíamos pensado irnos a dormir a Cuenca para escalar allí hoy, pero sólo fue un momento...

Decidimos quedarnos en casa, así que hoy hemos hecho una de Pedriza.

Le ha tocado la suerte a la Peña del Reloj.

Nubladete, airecito frío...brrrrr...qué más se puede pedir??

A la espera nos quedamos del próximo fin de semana...